OPINIÓN DE ESPECIALISTAS

Indicadores económicos favorables a la nación

Recientemente, el Monitor de Tendencias de Inversión Global de la Conferencia de las Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD), informó que en 2023, México se ubicó entre los cuatro países del G-20 que vieron crecer 21 por ciento la entrada de flujos de Inversión Extranjera Directa (IED). A nuestro país llegaron el año pasado 43 mil 900 millones de dólares, reforzando su posición como receptor y destino de proyectos productivos (1).

Asimismo, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), dio a conocer en 2023 que casi nueve millones de mexicanos han salido del nivel económico más bajo entre 2020 y 2022. Las cifras de personas en situación de pobreza sigue siendo alta -46.8 millones de mexicanos, 36.3 por ciento de la población total- pero ha mejorado radicalmente en los últimos dos años; también lo ha hecho la pobreza extrema, que bajó 1.4 por ciento en el país, añadió el organismo (2).

Los indicadores anteriormente señalados contrastan con los vaticinios catastrofistas de grupos de presión política e intereses económicos, que desde antes del inicio del presente sexenio gubernamental invadieron foros, espacios en cámaras legislativas y en prensa nacional y extranjera, con el cuento que México se vendría abajo económica y socialmente, a causa de un gobierno cuya actuación prioritaria es a favor del bienestar social.

Los hechos han demostrado que no es así; por el contrario, hubo consenso con los dueños de capital para direccionar sus actividades en favor de proyectos productivos, ahora con el propósito de crear infraestructura y dotar de equipamiento urbano, con la finalidad de ofrecer satisfactores a la población y beneficio a inversionistas.

Se ofreció la participación empresarial en obras de gran alcance como la refinería Dos Bocas, en Tabasco; una carretera interoceánica que comunica el Océano Pacífico con el Golfo de México a través del Istmo de Tehuantepec; la creación del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA); una red ferroviaria en el sureste mexicano para atraer turismo nacional y extranjero, entre otras obras de diferente magnitud en todo el territorio de la nación.

Tras el paso de la pandemia por Covid-19 en el periodo 2020-2021, este conjunto de obras fueron parte importante en la enorme tarea de la reactivación económica; además, la inflación no obstante que se extendió por todo el mundo, en México no rebasó el 8 por ciento, por haber sido contenida debido a la exención al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) en las gasolinas, esto significó que el costo de la carestía no haya escalado más.

Paralelamente, de 2018 a 2024 el salario mínimo ha tenido un aumento nominal significativo, pasando de 2 mil 650 pesos mensuales a 7 mil 468 pesos, en porcentaje representa un incremento de 181.81 por ciento, pasando así nuestro país a ser el sexto con el salario mínimo más alto en América Latina.

Aquellos empresarios, prensa y partidos políticos que se escandalizaron por el arribo de un mandatario con un proyecto de gobierno que se finca en el bienestar de la población, fracasaron en sus pronósticos y por lo visto hasta hoy, seguirán naufragando pues su propuesta es regresar a un pasado de corrupción y saqueo de los bienes y recursos del país. Más de 2 billones de pesos se han podido obtener en el combate a la corrupción que practicaron estos salteadores de la nación (3).

Hemerografía:

1) El Financiero, 22/01/2024, (Leticia Hernández y Héctor Usla).

2) El País, 10/08/2023, (Beatriz Guillén).

3) La Jornada, 23/01/2024, (Carlos Fernández-Vega),

Por:Miguel Melo González