Un grupo de diez jueces se reunió el domingo por la mañana en la explanada del Poder Judicial de la Federación en Cuernavaca, con la intención de colgar sus togas como señal de luto, al considerar que “la justicia en México ha muerto”. Sin embargo, cuando se disponían a llevar a cabo el acto, personal del Poder Judicial les informó que no podían hacerlo debido a la veda electoral.
Omar Sandoval Labastida, juez laboral del Primer Tribunal del Décimo Octavo Circuito con sede en Cuernavaca, explicó que la manifestación fue iniciativa de los propios jueces, quienes consideran que la justicia está “ahorcada” y temen ser destituidos próximamente.
INSERTO OMAR SANDOVAL LABASTIDA, JUEZ LABORAL
Los juzgadores instalaron un tendedero en el que colgaron sus togas como acto simbólico, en señal de inconformidad ante las recientes reformas que permitirán la elección popular de jueces y magistrados. No obstante, minutos después fueron obligados a retirar la protesta por “órdenes de autoridades superiores”.
