En Morelos, la desesperación se teje con hilos de esperanza. Patricia García Navarro y Romana García Miranda –ambas, madres buscadoras–, lo saben.
Tras la desaparición de sus hijos, no paran: denuncian, protestan, investigan, “varillan” la tierra, buscan y bordan, en la esperanza de dar con sus seres queridos.
Patricia, busca a su hijo Angel Montenegro García desaparecido el 28 de agosto 2022; mientras que Romana lleva cuatro años investigando el destino de su hijo, Omar Briceño García. Su lucha es un poderoso testimonio de resistencia ante una realidad que carece de cifras exactas y avances claros en las investigaciones.
Junto con otras integrantes de los colectivos “Regresando a Casa Morelos” y “Existimos porque Resistimos”, han encontrado una forma simbólica y conmovedora de mantener viva la memoria y la esperanza: el bordado.
Ellas, bordaron una manta con más de 120 rostros de personas desaparecidas desde 1997 y hasta marzo pasado, que encabezará la marcha que este 30 de agosto realizará por las calles de Cuernavaca, en el marco del Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas. Los rostros de Ángel y Omar, también estarán ahí y junto con ellos, el llamado a la sociedad y las autoridades para reconocer y actuar ante esta grave problemática social.