OPINIÓN DE ESPECIALISTAS

Artesano modelador de sueños

Jesús Sedano Hernández

Dirijo esta carta con admiración a todos aquellos maestros y maestras que trabajan con las almas. ¡Sabes lo que tienes que hacer! Desarrollaron y motivaron mi caminar para ahora ejercer la profesión que decidí.

El maestro o maestra trabaja con emociones y sueños. Mi etapa de educación infantil hasta la universidad fue de aprender y enseñar, por ello digo: me ayudaron a crecer y desarrollar a paso firme cada grado dentro del aula.

Recordamos nuestras mañanas, al tener frente a nosotros a nuestra guía, acompañante que nos enseñó y mostró su apoyo. Grandes maestros o maestras, que me impresionaba tanto la pasión con la que se entregaban a su labor de educar, me enseñaron que aman lo que hacen.

Comunicar y transmitir es a veces difícil, enseñar a tiempo a usar el borrador para escribir nuevos caminos, sueños de profesionales es algo que no se olvida.

Agradezco la tarea más grande, qué día a día sigo realizando a partir de mi graduación y titulación, el liberar todo mi potencial. Recibí una educación para toda la vida, ahora soy un adulto que seguirá jugando como niño.

Ahora, puedo leer la vida y escribir mi propio caminar. Una responsabilidad con sensibilidad, valores, decisiones y este amor a la cultura. Las palabras de un maestro pueden cambiar la vida de un alumno.